El Portal hacia los Sernios.

Capítulo 1

Busco el chocolate por toda la cocina pero no lo encuentro. Otra vez han vuelto a llevárselo, ya no hay lugar en la cocina dónde poder esconderlo. Subo las escaleras y entro en la habitación de Lucy. ¡Bingo! Pero no está sola, tiene cómplices. 

-¡¿Se puede saber qué hacéis?! ¡¿Cuántas veces os tengo que decir que no comáis chocolate aquí?!

-¡Sofía!

-¿Quieres un premio? Venga, fuera de aquí no quiero veros… pero antes, ¿quién ha sido? Quiero un nombre ya.

 La mirada de Sofía enfadada era mil veces peor que la de la señorita Parker, mi profesora de historia.

 -Pues… la verdad es que no hemos sido nosotras. Cuando subimos a mi habitación ya estaba aquí.

-Claro. Fue el duende mágico ¿no?

-¡Exacto! Me lo has quitado de la punta de la lengua.

-Pues dile al duende que se queda sin chocolate en su tarta de cumpleaños, que en vez de eso tendrá un poco de crema de arce. Os quiero duchadas en media hora y dadme eso, tal vez podré llegar a hacer un poco de crema.

-¡Crema de arce no! Todo menos eso. Sofía, ¡por favor!

-Ya veremos.

-¡Gracias! ¡Gracias! ¡Eres la mejor hermana del mundo!

-Eso ya lo veremos porque ahora solo quiero que os quitéis de mi vista las tres. Jessei, Rosie a vuestro cuarto. Y tú… recoge esto antes de que me de cuenta.- dije guiñándole un ojo a mi hermanita pequeña.

 Salí de la leonera de Lucy y bajé a intentar terminar lo que supone que era una tarta de chocolate… Después de un par de retoques aquello parecía una tarta en condiciones.  Recogí la cocina y subí a darme una ducha. Adoraba entrar en mi habitación y recodar cada uno de los momentos que había pasado allí devorando un buen libro. Preparé la ropa y entré en la bañera.

 ¿Qué ponerse? Es una pregunta difícil y sobre todo el día de tu cumpleaños. Llevaba un rato buscando en el armario pero no encontraba nada de nada. Al final me decidí por un vestido blanco, un par de tacones marrones y el pelo semi recogido. Me miré al espejo del baño y estuve satisfecha de mi trabajo. Bajé al salón y allí estaban todas. Sofía mi hermana mayor (la mayor de todas) llevaba una falda ceñida negra y una blusa de volantes blanca junto con unos tacones a juego con la falda. Llevaba el pelo suelto le quedaba muy bien. Después venía Jessei, era la segunda. Ella llevaba un vestido color rosa suelto con unos tacones corridos en color palo, el pelo lo tenía recogido y ahora estaba Rosie. Ella era, como yo, una loca (claro que en el buen sentido) esta vez había optado por unos vaqueros pitillo, con sus tacones palo y la blusa de flores turquesas. Llevaba el pelo suelto, tenía una melena grandísima que muchas envidiaban.

-¡Estás preciosa Lucy!

-Vosotras tampoco estáis tan mal.

-No sabes que recuerdos me trae este día, todavía recuerdo cuando cumplí 15.

-Sí pero ahora tienes 20, tienes que superarlo Sofía.

-Oye para que lo sepas estoy en la flor de la vida.

-Sí si si…

 Me acerqué a la mesa y me senté en mi silla de siempre. Las demás hicieron lo mismo y me cantaron cumpleaños feliz.

 Ahora me tocaba cortar la tarta, como siempre porque Jessei, Sofía y Lucy no eran unas hachas en esto… Después de repartir los trozos le di mi regalo a Lucy. Unas Vans lila. El de Sofía era un collar con un pequeño brillantito en el medio. Jessei optó por un collage de fotos antiguas y de la última salida familiar a parte de unos tacones nuevos. Pero Lucy no quería ver esos regalos, ella quería el talismán. En nuestra familia éramos algo especiales. Al llegar nuestro décimo quince cumpleaños se nos era entregado el talismán. Con este podía hacer nuestra propia magia al igual que entrar en el mundo de los Sernios. Nos llamaban Irisas. Cada una lo teníamos de una forma u otra, pero era algo que teníamos que cuidar.

 -Bueno ahora lo que estabas esperando. Toma ya sabes que ahora te toca protegerlo.

-Lo sé.

-Bien así mañana podremos ir por primera vez con Lucy. Hace tiempo que no vamos y tengo ganas de ver a Hilda, Diíta y demás.

-Sí mañana es trece y habrá luna llena así que verás tu nuevo look.

-Es verdad ¿cómo será mi pelo? ¿Y el vuestro? Nunca lo he visto.

-Ten paciencia, ahora vamos a dormir. Mañana será un día muy largo.

 Varios meses después…

 -Chicas ayudadme con esto, yo no puedo sola.

-Fuiste tú quien decidió mudarse no nosotras.

-Venga chicas, es un nuevo lugar eso significa aventuras. Además debido a mi trabajo tuve que venir.

-Sabes que no tienes porqué trabajar. Con la magia podemos sobrevivir.

-A ver que os quede una cosa clara. Ante todo somos cuatro hermanas totalmente corrientes y creo que os vendrá bien un cambio de aires. Por el momento no quiero que uséis la magia a no ser que estéis en vuestro cuarto ¿entendido?

-¡¿Pero?!

-Nada Lucy. Jessei, Rosie coged esas cajas de allí todavía nos quedan cosas por meter en el maletero.

 Después de terminar con las cajas nos montamos en el coche. Sofía iba conduciendo, Jessei de copiloto y Lucy y yo atrás. Encendí mi IPOD y busqué la carpeta de All Time Low, lo necesitaba…

Álvaro