Capítulo
8
Bueno,
faltan cinco minutos para que Spencer llegue. Kate ya está lista. Lleva un
recogido a lo Taylor Swift, unos pendientes de perlas y la pulsera a juego.
Decidió no maquillarse mucho, porque no sabía cómo iba a vestirse él, ahora
pensando, ¿y si Spencer se ponía unos vaqueros normales y ella iba tan
arreglada?
En
ese momento suena el timbre. Está ahí.
-Ya
voy yo.
-Vale
Kate.
Se
acerca a la puerta, se arregla, comprueba que todo esté en su sitio y abre la
puerta. Es él, lleva una blusa azul que hace juego con sus ojos, un pantalón
negro y una americana.
-Vaya,
Kate, estoy sin palabras.
-¿Qué
estoy manchada?
-No,
pero puede que yo si.
-No
¿por qué ibas a estar manchado?
-Porque
se me cae la baba.
-Ja,
ja.
Entonces
se besaron, pero no fue un beso muy largo, ya que Clara apareció para saludar
al invitado. Se fueron a cenar, la verdad es que todo fue fantástico, a sus
padres les gustó mucho que el chico sacara buenas notas, no querían a un vago
como yerno.
Después
del postre Spencer se fue y Kate subió a su cuarto, había sido una noche
espectacular. Pero seguro que la del viernes lo sería aún más…
Iris
acababa de llegar del cine, estaba deseando que fuera viernes, solo quedaba un
día, pero estaba impaciente por ir a New York. Se conectó al tuenti pero
ninguna de las chicas estaba conectada. Da igual, pero entonces miró
mejor y vio que Kate si estaba. Le empezó a hablar y esta le contó la cena, y
así dos horas, hablando del blog, de sus novios, de todo, (vamos conociéndose)
así que llegó la hora de dormir.
El
jueves pasó sin ninguna novedad. Por fin llegó el viernes. Las chicas estaban
comiendo juntas. Todas le habían dicho a iris que les trajera un recuerdo.
Estaban un poco celosas, también querían ir allí, pero se alegraban por ella.
Aunque en el fondo todas menos Iris sabían algo que a ella le iba a encantar.
-Entonces,
Kate era una bola de nieve. Emma una púa con la estatua de la libertad o las
letras NY. Rebecca era una camisa. Vale creo que lo tengo todo.
-No
te olvides de las fotos.
-Eso
nunca.
-Bueno
chicas yo me voy que Spencer me va a acompañar a casa.
-Yo
tengo que ir ya a esperar a Josh. En media hora ponemos rumbo a NY.
-Yo
tengo que ir a entrenar, de hecho, mi madre está allí. Nos vemos.
-Bueno
chicas nos vemos el lunes ya me diréis.
-Adiós
Emma.
-Chao.
-Bye.
Emma
se quedó sola terminándose su sándwich mixto. Cogió su guitarra y emprendió el
camino a casa. Entonces oyó como alguien gritaba su nombre. Se giró. Era Jason.
Estaba corriendo hacia ella.
-Hola,
madre mía caminas muy rápido.
-Perdona
es que estaba escuchando música.
-¿Qué
escuchas?
-Alone de Heart.
-Si
es muy bueno el tema.
-Bueno
y ¿Qué hacías corriendo?
-Intentaba
cogerte por sorpresa y acompañarte a casa o a dónde vayas.
-Ah…
-¿Estás
bien?
-Sí,
bueno, la verdad es que me da un poco de envidia, todas tienen algo con una
persona especial, sabes pueden compartir su vida, sus secretos, aficiones, los
tendrán ahí cuando estén mal, les harán reír. No me malinterpretes, me alegro
por ellas, pero a veces me gustaría, no sé… ¿me entiendes?
-Más
o menos, sé lo que sientes, yo hace un mes que rompí con una chica, era
maravillosa, pero era demasiado caprichosa.
-Lo
siento, ojala la próxima no sea así.
-Eso
espero.
-Bueno,
y ¿qué tipo de música te gusta?
-De
todo un poco, incluso algo de rock duro.
-Ja,
ja. Nunca pensé verte con barba, y gritando hasta que no te quede aire en los
pulmones.
-Y
no me verás, simplemente me gusta escucharlo.
-Y
a mí, pero dime una cosa, ¿te gustaría escuchar una canción? Es mía, y creo que
un experto como tú podría decirme algo.
-Claro.
Después
de muchas discusiones a cerca de música, grupos, etc. Llegaron a casa de Emma,
allí subieron a su buhardilla. Cogió la guitarra y le quitó el forro.
Después se sentó en una banqueta.
-¿Estás
preparado?
-Claro.
-Pero
solo tengo un par de estrofas, así que no te rías.
-Vale,
lo prometo.
La
música comenzó a fluir por la habitación.
-Please come back and stay with me
just one more time
I know you have to leave, but please let
me kiss your lips once.
Thanks to her I’ll be alone, thanks to
her you we’ll be far away.
You teach me how to love, you make my
dreams come true, but know,
Right here I’m alone…
-¿Qué tal?
-Es
fantástica.
-Pero
no sé, es demasiado romántica y triste.
-No,
solo tienes que darle algo más de ritmo al estribillo.
-Vale,
¿qué tal si voy a por un trozo de tarta y la terminamos?
-Vale,
me parece perfecto.
-Ahora
mismo vuelvo.
-Emma.
-¿Sí?
-Gracias.
-¿Por
qué?
-Por
esto, es mágico.
Continuará...
Álvaro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario